Inicio » Relatos de Familia » Una Noche con mi Abuela - 2ª Parte

Una Noche con mi Abuela - 2ª Parte

En primer lugar gracias por todos los email que he recibido. Gracias por los
buenos pensamientos. Como dije estoy escribiendo no para que les guste ni les
disguste Esto es solo historia vivida que me estoy confesando ante ustedes.

Como les contaba al otro día, después de tan linda noche con mi abuela, fui a mis
estudios. Iba pensando que esto debía compartir con alguien muy cercana a mí.
Entonces busqué a Anita, ella es una buenísima amiga mía, un poquito mayor que mí.
Le pedí que habláramos a solas, tenía algo muy especial que contarle. Acordamos
que tomaríamos el lunch juntas en un lugar apartado donde nadie nos moleste.

Así fue nos encontramos al medio día. Lo primero que me dijo, cuéntame todo que
te ha pasado, más problemas con tu padrastro o tu abuela???

-No, Anita, no con mi padrastro, con mi abuela.. No me interrumpas. Lo que
sucedió es que yo soy miedolenta a los truenos y relámpagos. Entonces le pedí si
me podía quedar a dormir con ella. La abuela aceptó.

Luego le narré, a Anita, todo, todo lo acontecido en la cama con la abuela.
Luego le conté que esta mañana al ir a desayunar las dos no nos mirábamos a los
ojos y casi no hablábamos. Solo al despedirnos me dio un fuerte beso en la
frente. Le dije a Anita, que eso yo lo había interpretado como un acto de
vergüenza entre las dos, o por lo menos de mi parte. Había tenido un lindo orgasmo
y creo que también la abuela. Pero tenía un cierto remordimiento. Después de
haberme oído todo. Me dijo, Anita:

-Mira Marlene, es posible que haya habido vergüenza entre las dos, era la primera
vez que eso sucedía. Pero si me es claro que tu abuela quiso sentir tu cuerpo,
tus caricias; se contagió de amor y sexo. Ella se sintió mujer, tal como es. Y,
desde mi punto de vista, somos mujeres con deseos y sentimientos, no importa la
edad ni el parentesco. Ese fue una falso tabú y una hipocresía el no responder a
sus muestras de cariño. Tu abuela ha pasado algunos años sola, parece que tuve
algunos pretendientes, asi se habla en el pueblo. Y ella, como tu y yo tenemos
necesidades: alimentación, vestido, seguridad y las sexuales. Marlene, tu debías
corresponderle en los deseos de ella-

-Pero Anita, ella es mi abuela y hay recelos y miedos de mi parte.
-Debes dejarte de vainas, de esos falsos sentimientos. Eres mujer y ella es mujer
y tu puedes darle lo que busca, o lo que te pide. Después de todo así hubieran
culeado con ella de allí no sale hijo. Hay problemas cuando quedas preñada por un
pariente, los genes y otras vainas más. Tenías que darle………..
-Que……
-Placer!
Hubo un poco de silencio, no dije nada, entre mi pensé que Anita tenía razón y que
yo había actuada egoístamente. Anita rompió el silencio,
- no te parece…… que….
- Si Anita, pero yo no sé, nunca tuve tal experiencia-
- Marlene, te voy a contar un secreto, porque las dos somos buenas amigas, se que
tu no vas hablar. Con mi hermana Claudia, que es mayor que mi con dos años.
Compartimos, hasta cuando salió del pueblo, el mismo dormitorio con dos camas. La
de ellas era más grande que la mía. Una noche linda de luna. Decidimos bañarnos.
Por primera vez fuimos las dos desnudas. En el baño jugamos, nos tocamos y
acariciamos, no reimos. Pero tratábamos de no hacer bulla, por nuestros padres.
Salimos del baños nos secamos ella me secó a mi y yo a ella. Claudia, me decía
tienes unos bonitos senos, pero yo le decía que de ella eran más grandes. Luego,
le dije, - - Claudia y tu tienes más pelos por la vagina que yo. Me dijo que todo
era por la diferencia de edad.
-Pero se te ve lindo, Claudia!.
- Y eso que está despeinada, me dijo.
Salimos de la ducha y fuimos a la cama. Me dijo quieres peinarle a la cuquita.
Le dijo que bueno.. Qué lindo fue ver a mi hermana acostada, luego abrió sus
piernas y yo le peinaba. De pronto le dije,
- oye, hermana tu tienes un clítoris mas grande que el mío.
Me dijo deja ver el tuyo- Me acomodé en la cama. Abrí mis piernas y mi hermana
comenzó poéticamente hablar de mi vientre, del ombligo de mis pelitos, luego fue a
la vagina y le abrió un poquito hasta encontrar el clítoris, Y me dijo que en
realidad era pequeño, pero lindo. Te lo voy a besar y comenzó a besarlo,
chuparlo. Era una linda sensación, nunca sentida antes. Le pedí que siguiera,
con otra mano agarró una de mis tetas y le acariciaba a momentos duro, pero me
gustaba. Me acariciaba el vientre, las piernas y las nalgas, con su mano levantaba
mi culo. Terminé por primera vez un orgasmo y salieron unos jugos, ella decía:
Qué ricos son!.
Claro que antes me hacía mis pajas, cuando ella dormía. Me quedé exhausta
apretando con una mano mi vagina. A poco me recuperé y le pregunté que me
gustaría hacer lo mismo con ella. Ella me dijo que bueno, entonces comencé
acariciándole las tetitas y que lindo cuando noté que los pezones crecían y se
ponían duros, con su mano llevó mi boca a sus tetas y con desesperación las besaba
y chupaba esos bellos pezones. Mi hermana subía y bajaba el culo, luego me fui al
clítoris y trataba de hacer lo mismo que mi hermana, primero besar alrededor de su
vagina, y de pronto apareció el clítoris que lindo, como un pene de bebé. Lo
comencé a besarlo. Luego a mamarlo, chuparlo, lo sacaba y metía de mi boca, que
hermosa sensación. Le seguía masajeando las tetas y a veces duro sus pezones.
Ella deliraba. Con una mano aplastaba mi cabeza contra su raja y metía mi lengua,
Luego tomó mi mano y le llevó hasta su ano y me pidió que le meta un dedo en el
culo. Y yo un poco tímida lo
hacía apenitas. Ella me dijo, metelo duro sin miedo, pero ponle un poco de saliva a
los dedos. Lo hice, perdí el miedo y le metía y sacaba el dedo con facilidad,
luego me dijo otro más que ya no aguantaba más esa tortura de la espera. Yo ni
corta ni perezosa puse saliva en los dedos y le metí dos de golpe. Dijo ayyyyyyyy.
Me haces dolor, pero sigue, sigue, hermanita….. mételos y saca
Massssssssssss., masssss
Mientras aplastaba mi cabeza contra su raja, la cuca estaba roja y los labios
vaginales los notaba hinchados, los jugos le salían abundantemente. Siempre tuve
asco pera esta vez me dio gusto que chupaba sus jugos. Ella se tapaba la boca con
la almohada y chillaba desperada y me pedía culéame más hermanita,
masssssssssssssssssssss, yaaaaaaaaaaaaaaaaaa- Asiiiiiiiiiiii. Luego nos besamos
frenéticamente y con su lengua parecía que culeaba mi boca- Qué
rico!!.................
Bueno, Marlene, Tuvimos otras noches de placer con mi hermana-. Como tu sabes, en
las próximas navidades ella se va a casar. No creo que se haya hecho lesbiana o
será bisexual, no sé. Algún momento me contará.
-Anita, le dije, muchas gracias por contarme tu historia, sabes que estoy mojadita
después de haberte escuchado, tengo un inmenso calor en mi cuerpo. Asi quisiera
tener una maestra.
- Yo puedo darte unas clasecitas, sin costo alguno. Jajaja. Oye, a propósito
este fin de semana, los Andrade tienen una fiesta de cumpleaños en su casa. Me
han invitado. Les puedo decir que voy contigo y esa noche me quedo en tu casa,
después de la fiesta, y allí conversamos más del tema, qué te parece.
-Magnífico, Anita, yo le cuento a mi abuela de la invitación y le pido permiso
para que te quedes conmigo. No creo que se oponga-
HECHO- HECHO y a todo pecho. Nos despedimos con un beso hasta vernos el fin de
semana, en la casa de los Andrade. Lo que viene será motivo de otro relato.
Cualquier comentario pueden hacerlo con entera confianza a
marlenemiravalles@yahoo.com


by Marlene FOTOS

Este artículo no tiene comentarios.

Escribe un comentario







Código de Validación:

Introduzca el Código de Validación:




Estadisticas Usuarios

  • Online: 76

Categorias

Articulos Relacionados

Articulos Mas Vistos

Nuevos Comentarios

Recomienda Superrelatos a Tus Amigos

Tu Nombre:

Correo de Amigo:

Código de Validación:

Introduzca el Código de Validación: